Un traje es capaz de hacernos lucir elegantes, con estilo y sobre todo como un auténtico caballero, pero si lo usas de forma incorrecta lograrás todo lo contrario. ¿Quieres conocer estos consejos? Quédate a leer y toma nota:
Las mangas de la camisa
Dejar que el puño de la camisa se asome un centímetro o centímetro y medio por debajo de las mangas del saco nos dará una imagen más fresca, estética y moderna. De lo contrario daremos una impresión de ser anticuados.
Largo del saco
¿Tienes problemas escogiendo el saco correcto? Te compartimos un secreto: pon los brazos a los lados del cuerpo y el bajo del saco deberá llegar a la mitad del dedo pulgar aproximadamente.
Cero arrugas
Las arrugas dan un aspecto de descuido y eso es lo último que queremos reflejar. Si vemos un exceso de arrugas en las mangas, hombros o cualquier otra parte del traje, estás escogiendo una talla muy grande o pequeña.
Cuando te sientes desabrocha los botones
Puede parecer obvio, pero muchas veces es una acción que se nos olvida. Al sentarte es importante que desabroches tu saco, de lo contrario se deformará. Además, le daremos protagonismo a la camisa y la corbata.
Corbatas sí, pero no siempre
Las corbatas son el accesorio más utilizado al momento de vestir un traje porque tiene el poder de transmitir elegancia y formalidad, lo que la hace perfecta para utilizarla en reuniones con clientes, jefes o eventos muy formales, pero para aquellas ocasiones casuales lo mejor será prescindir de ellas.
Último botón desabrochado
Si tu saco es de un solo botón, deberá estar abrochado, pero si es de dos botones (lo más común hoy en día) solo abrocha el de arriba. En caso de que sea un saco con tres botones, deberás abrochar el de en medio y el de arriba queda a tu elección.
Si tienes dudas, recuerda que nuestros sastres en Emporium se volverán tus mejores aliados cuando necesites cualquier tipo de asesoría. Recuerda que una de las prendas más esenciales en las cuales un hombre suele mostrar su personalidad es el traje.